Los narcotraficantes usaron unas marcas para identificar el alijo.
La Dirección de Antinarcóticos de la Policía y la DEA siguen teniendo en su radar a Norte de Santander por la constante producción de cocaína que se exporta desde la zona del Catatumbo hacia Centroamérica y posteriormente a Estados Unidos.
Precisamente, en medio de las labores de inteligencia de las autoridades, se detectó que una aeronave de matrícula HI-950 había despegado desde Venezuela con destino a Centroamérica, con 520 kilos de cocaína, que fueron producidos en el Catatumbo.
Las investigaciones determinaron que la cocaína fue elaborada en los laboratorios artesanales, bajo el dominio de los grupos armados ilegales que delinquen en esta zona del departamento, desde donde fue transportada vía terrestre hasta la alta Guajira, para luego pasar la droga a Venezuela y así cargar el avión.
La oportuna alerta del ‘narcoviaje’ fue fundamental para que la Policía de Mayaguana, en Bahamas, interceptara la aeronave y así se incautó de la cocaína que estaba camuflada en algunos sacos.
“Este cargamento había salido de laboratorios clandestinos ubicados en Norte de Santander y desde allí fue transportado por vía terrestre en camiones hasta centros de acopio en la Alta Guajira y posteriormente era pasado a Venezuela para cargar la aeronave en una pista clandestina”, explicó una fuente judicial.
Según la Policía, este cargamento de cocaína tiene un costo aproximado de 18 millones de dólares, lo que representa una afectación importante a las finanzas de las organizaciones de narcotráfico.
Las autoridades continúan adelantando investigaciones contra estas organizaciones.
El Ministerio de Defensa confirmó que en las Bahamas fueron decomisados 520 kilos de cocaína del Catatumbo que iban en una aeronave procedente de Venezuela, en desarrollo de una operación conjunta en la que también participaron autoridades de República Dominicana y agentes de la DEA.
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