Nicolás Maduro celebra su reelección con un discurso de victoria en la plaza de Miraflores, reafirmando la fortaleza y dignidad del pueblo venezolano frente a una multitud de seguidores.
Nicolás Maduro, Reelecto presidente de Venezuela
En la emblemática plaza de Miraflores, en Caracas, sede del gobierno venezolano, el presidente reelecto Nicolás Maduro se dirigió a una multitud de seguidores en un discurso de triunfo. Frente a cientos de militantes que coreaban "¡Vamos Nico, vamos Nico!", el mandatario expresó su agradecimiento y orgullo por el apoyo recibido en las urnas.
En un escenario adornado con colores patrios, grupos musicales dieron la bienvenida a Maduro con canciones en su honor. Los presentes, todos vestidos con chaquetas deportivas que llevaban la frase "Ganó mi gallo pinto", celebraban la victoria del "gallo fuerte", apodo con el que Maduro se identificó en los últimos meses para contrastarse con su rival, Edmundo González Urrutia, a quien describía como "pataruco" y débil.
Tras ser declarado ganador por el Consejo Nacional Electoral (CNE), con un 51,2% de los votos frente al 44,2% de González, Maduro proclamó: “No pudieron con las sanciones, no pudieron con las agresiones, no pudieron con las amenazas. No pudieron ahora. No podrán jamás con la dignidad del pueblo de Venezuela". En su discurso, reiteró la fortaleza del país y la resistencia ante lo que describió como intentos de socavar la soberanía venezolana.
Maduro también rindió homenaje al fallecido presidente Hugo Chávez, en el día que hubiera sido su cumpleaños número 70, diciendo: "Comandante Hugo Chávez, es tu triunfo, este pueblo jamás te ha fallado. Que viva Chávez y la patria sigue".
Según el informe preliminar del CNE, con el 80% de los votos escrutados, Maduro habría obtenido 5,15 millones de votos, asegurando así su tercer mandato consecutivo de seis años. La victoria de Maduro refleja, según sus palabras, la "dignidad del pueblo de Venezuela" y su determinación de seguir adelante pese a los desafíos.
La celebración en Miraflores fue una muestra de apoyo inquebrantable al presidente reelecto, quien prometió continuar con la lucha por la patria y mantener el legado de Chávez vivo en cada rincón de Venezuela.
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