La deteriorada condición de los puentes peatonales en Cúcuta ha generado gran preocupación entre los transeúntes, quienes cada vez experimentan una creciente sensación de inseguridad al utilizar estas estructuras.
La percepción de riesgo al cruzar estos pasos elevados es cada vez más evidente, con muchos peatones temiendo ser víctimas de robos. Esta situación ha llevado a algunos a optar por arriesgar sus vidas cruzando directamente las calles, evitando así cualquier posible encuentro con delincuentes.
A pesar de que en un principio estos puentes fueron diseñados para proporcionar un cruce seguro y libre de obstáculos, con el tiempo se han convertido en puntos críticos de inseguridad.
La falta de mantenimiento es evidente, con puentes como los de Sevilla y la avenida Kennedy, así como el que conecta los barrios Tucunaré y Palmeras en la parte alta, quedando en completo abandono entre óxido y preocupaciones de seguridad. La comunidad ha expresado su descontento a través de plataformas digitales debido al evidente deterioro de estas estructuras.
La situación de abandono de los puentes peatonales es alarmante: cables sueltos, paredes a punto de colapsar, óxido en las estructuras, láminas desprendidas y en algunos casos una vegetación descontrolada.
Mientras tanto, la nueva administración encabezada por el alcalde Jorge Acevedo no parece mostrar un interés significativo en abordar este problema de manera efectiva, lo que genera aún más preocupación entre los residentes de la ciudad.
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