Fuente: Diario El Frente
Familiares, amigos y conocidos de Esperanza Navas Sánchez, fiscal primera seccional de Tibú, están sumidos en una profunda tristeza y desconsuelo ante su violenta e inesperada partida. Navas, quien era oriunda del municipio El Socorro, Santander, fue asesinada sobre las 11:15 de la mañana el pasado miércoles por un sicario que ingresó abruptamente a su vivienda ubicada en en la carrera 8 con calle 7, del barrio Los Libertadores, Norte de Santander.
Ante el cruel y despiadado ataque, las autoridades encabezadas por el fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa Delgado, activaron todos los mecanismos para dar con la captura y paradero de los responsables. En rueda de prensa Barbosa manifestó que, "Tenemos varias hipótesis, todas evaluadas por el equipo técnico de investigadores. Pronto tendremos resultados. La primera hipótesis es que su muerte puede haber sido ocasionada por la labor que desempeñaba como fiscal. Otra, se refiere a unos patrones de muertes de mujeres en Tibú. La tercera, es la que tiene que ver con la conflictividad que hemos venido observando entre el Eln y las Farc del frente 33".
Tras la muerte de Esperanza, quien estaba adscrita al ente acusador desde el 2008, se conoció que tenía a cargo más de 400 procesos penales por cultivos de uso ilícito, rebelión, homicidios dolosos y culposos. Para lograr la ubicación y captura el funcionario dijo que "La Fiscalía no va a dejar de aplicar la justicia en esa zona del país. Llamamos a la colaboración ciudadana con las autoridades de lo contrario será muy complejo", agregó el fiscal Barbosa. Además fue enfático en afirmar que todos los protocolos de seguridad para los funcionarios de la fiscalía están activados y advirtió que la fiscal no había reportado ninguna situación de riesgo contra su vida, por eso las hipótesis se mantienen abiertas.
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